La Asociación para la Promoción y Defensa de la Patata de la provincia de Burgos se ha formado para potenciar este cultivo tan arraigado en la provincia burgalesa, y para ello tras los estudios de caracterización pertinentes ha establecido un Reglamento de Uso, que deben cumplir todos los que quieran producir y envasar bajo esta denominación de calidad.
Tanto agricultores como envasadores deben asegurar la trazabilidad del producto a través de sus cuadernos de campo y de almacén, y de los documentos de acompañamiento. Un Comité de Control formado por ingenieros supervisa todo el proceso.
El rudo clima burgalés, el suelo fértil, los cuidados tradicionales de los agricultores, el esmero en la selección y en la conservación de los envasadores y los rigurosos controles de los técnicos hacen que la Patata de Burgos llegue al consumidor con la garantía de una calidad superior, contrastada y reconocida.
De esta manera, sólo los lotes de patata que han pasado los análisis de calidad culinaria establecidos salen al mercado con la etiqueta y logotipo que avalan su origen y calidad.
Por eso la Patata de burgos es Sabor de la Tierra.